domingo, 1 de mayo de 2011

... pues albóndigas de choco

Estuvimos en Bajo de Guía de los Bermejales. Siempre nos ha gustado mucho, y pedimos albóndigas de choco que estaban para tirárselas a la cara al cocinero. El resto de lo que pedimos bien, especialmente las tortillitas de camarones. Total que le dije a los López Vozmediano que teníamos que hacer un acto de desagravio y que al día siguiente les invitaba a comerlas como Dios manda (y en Huelva aprendí).
Compre un choco fresco que pesaba un kilo. Lo trituro con el aparato que trae la batidora para picar, lo pongo en un bol y añado ajo, cebolla y perejil picados, sal y dos huevos batidos con un chorreón de leche. Se le añade pan rallado lo suficiente como para poder hacer la albóndiga. Le suelo añadir un poco del vino con el que después haremos la salsa. Se enharinan las albóndigas y se fríen.
La salsa al gusto, por ejemplo, sofriendo pimientos de asar rojos, pimiento de freír, ajo, cebolla, tomate, vino, sal y pimienta. Se le añaden las albóndigas, que se guisarán unos 10 minutos con la salsa y a reventar. ¡Qué buenas y qué desagravio¡. Magníficas.

1 comentario:

  1. me recuerda a mi madre aunque estoy seguro que ella jamas las hizo
    http://pablosballesteros.blogspot.com

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